Ha llegado el gran momento, y la madre lo va a notar porque empieza las contracciones de parto o rompe aguas.
A estas alturas puedes sentirte muy cansada y con molestias di diverso tipo (tirantez en la tripa, incomodidad, falta de sueño, dolores en el suelo pélvico…) y probablemente estará deseando que nazca el bebé. Hay que mantener la calma, porque como veremos después el parto aún puede retrasarse.
Superar en una o dos semanas la fecha prevista de parto no tiene por qué representar un problema, y los médicos se suelen esperar más allá a la hora de inducir el parto. No obstante, se realizarán algunas pruebas para comprobar que el bebé sigue sano, se harán monitores con frecuencia y ecografías.
Casi el 10% de los embarazos llegan a la semana 42, sobre todo en el caso de madres primerizas, por lo que hay que mantener la calma si el momento del parto no se produce.
Esperamos que en esta semana 40 de embarazo todo transcurra perfectamente y que el parto, como se suele decir, sea rápido. Esperamos que nuestro recorrido del embarazo semana a semana haya sido de mucha utilidad y ¡enhorabuena por el bebé!