37% más de suicidios se registraron en Ecuador en lo que va del año 2021.
No es sencillo, pero el suicidio se puede prevenir. Identificar los factores de riesgo que advierten sobre el suicidio o los pensamientos suicidas y estar atento es muy importante para salvaguardar la seguridad de tus seres queridos.
¿Cuáles son los signos de alarma?
Estas señales pueden indicar un posible intento de suicidio:
- Amenazas directas de hacerse daño o quitarse la vida
- Buscar un modo de cometer suicidio; por ejemplo, comprar un arma o acumular píldoras
- Estar enfocado en la muerte, ya sea por medio de conversaciones, escritos, dibujos o publicaciones en línea acerca de la muerte o el suicidio; escuchar música o visitar sitios web relacionados con la muerte
- Tener un plan para un intento de suicidio; usualmente, mientras más detallado sea el plan, mayor es el riesgo
- Comportamientos y estados de ánimo asociados con la depresión, como los descritos
- Cambios de personalidad o de humor, incluso ponerse feliz o tranquilo repentinamente después de estar triste
- Descuidar la apariencia o higiene
- Hacer cosas arriesgadas o autodestructivas
- Regalar pertenencias significativas
- Atender asuntos del final de la vida, como crear un testamento o poner en orden el seguro de vida
- Despedirse de amigos y seres queridos
¿Qué hacer cuando se identifica señales de alerta o de ideación suicida?
- Limitar el acceso a posibles medios lesivos. Tener siempre presente que las personas suelen utilizar aquellos medios letales que son accesibles y más conocidos.
- Conservar la calma y no reaccionar de modo exagerado.
- Hablar con la persona y explicarle que entiende que se sienta desesperado y/o que se encuentran en una posición difícil y frágil y que hay ayuda disponible. Explicarle que no siempre se sentirá tan mal, y que con la ayuda correcta es posible que pueda manejar sus problemas y sentirse mejor en el futuro.
- Eliminar el acceso a cualquier método de suicidio y no dejar nunca sola a la persona. Si duda sobre el riesgo concreto, hable con ella y busque la ayuda de otras personas.
- Valorar el riesgo. Hable con la persona que podría estar en riesgo de suicidio y valore la situación. ¿Tiene un plan para matarse? ¿Tiene los medios para llevarlo a cabo? Si es así, la persona tiene un riesgo elevado de suicidio, busque ayuda inmediatamente y ayúdele a mantenerse a salvo.
- Hablar con otras personas que conozcan a la persona en riesgo de suicidio. Si usted cree que alguien puede tener ideas de suicidio, hable con otras personas que la conozcan para saber si ellos han notado también algo fuera de lo habitual o si piensan lo mismo.
- Ofrecer ayuda en tareas prácticas. Esto puede proporcionar a la persona la oportunidad de hacer otras tareas también importantes, pasar algún tiempo intentando resolver su situación o dándole tiempo libre, algo muy necesario.Acepte que la ayuda que usted ofrece puede ser rechazada, ya que algunas veces, las personas encuentran difícil aceptar apoyo o no quieren admitir que necesitan ayuda.
- Buscar ayuda profesional. Se debe buscar ayuda profesional de forma inmediata, una vez que surgen pensamientos relacionados con el suicidio, muchas veces hay un avance gradual hacia las ideas a la planificación, el siguiente paso son ciertos gestos, luego hay un intento y, finalmente, puede llegar la consumación.
- Cuídese usted mismo. Ayudar a alguien a enfrentarse a los traumas y al estrés puede ser muy fatigoso y dejarnos agotados. Encuentre algún tiempo para las cosas con las que usted disfruta y busque a otras personas que puedan ayudarlo a apoyar a quien más lo necesita.
Si necesitas ayuda puedes agendar una cita con nuestros especialista en psicología.
Elaborado por Psic. Francisca Marín Cevallos del HVQ.